Sosoriqui
El análisis político:
Por Carlos Rochín
Al igual que la frase pronunciada en el año 20 a. C. (antes de Cristo) por el emperador Augusto, en sentido de que, “todos los caminos conducen a Roma”; hoy, todos los caminos conducen al actual presidente de Mazatlán, Luis Guillermo “El Químico” Benítez Torres a un laberinto sin salida el cual podría tener en breve su desenlace con un final político inesperado a sus intereses.
Y es que el asunto, no se trata de simple escarnio, ni mucho menos de querer “agarrar caminito” en sentido de lo acontecido en la capital del estado, Culiacán, con el desafuero y posterior destitución del ex alcalde Jesús Estrada Ferreiro, sino más bien, se trata de una circunstancia crítica, que más allá de la vox populi, expertos en el tema, vislumbran la posibilidad para que el alcalde corra la misma suerte en función de la gravedad de sus actos en la función pública.
Lo que viene enseguida, podría catalogarse como una muy mala noticia que recibirán en poco tiempo los seguidores de “El Químico” Benítez, los que ha cultivado desde que el referido personaje fuera aspirante al gobierno del estado por Morena desde finales de 2020 y principios de 2021.
A Benítez Torres y a su administración se le señala por la compra de 2 mil luminarias LED con un valor por el orden los 400 millones de pesos, calificada como una adquisición abusiva e irresponsable al dejar con ello, un sin número de sectores sociales desprotegidos y sin posibilidad de mejora de acuerdo al impacto de la cantidad y dispersión del presupuesto.
Aunado a ello, pesa para el caso, una mala reputación de la empresa «Azteca Lighting» proveedora de las luminarias, la cual ha sido señalada de ser favorecida con contratos millonarios de esta índole desde el año 2011 con la existencia de algunos litigios.
No obstante lo anterior, cabe destacar que aunque el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres diga sentirse tranquilo, y a su vez, auto describirse como: “el hombre más feliz de Mazatlán” al sostener no sentirse perseguido por nadie y haber entregado solventadas las observaciones hechas por la Auditoría Superior del Estado (ASE); pareciera que su realidad podría ser todo lo contrario ya que el retirar el contrato actual, según la ley no le exime del delito.
Lo anterior lo afirmamos y se argumenta por si solo en el trascendido de que, a éstas alturas tanto la ASE, como la Fiscalía han hecho su trabajo a fondo, sin dejar de soslayar la pésima señal que envió la última visita del presidente de México; Andrés Manuel López Obrador a Sinaloa, donde las actividades se desarrollaron en el puerto y El Químico —“amisísimo” de AMLO—, fue prácticamente borrado del mapa político, social y como autoridad. ¿O no?
Asimismo, con elementos de causa se puede afirmar que existen los recursos suficientes en contra de Benítez Torres para que se inicie juicio político en su contra con barruntos de procedencia, en virtud de diversas quejas y demandas ciudadanas enviadas —y otras que están por llegar— al Congreso del Estado, como la que anuncian Interpondrán los integrantes de Ciudadanos Unidos por Mazatlán.
Mención a parte merece que, a nuestro buzón de comentarios, derecho de réplica y retroalimentación a esta columna, cuando hablamos del Alcalde mazatleco, recurrentemente mujeres nos solicitan se le investigue y se haga público el por qué despidió tan abruptamente a su anterior esposa como parte de la Comuna en la figura de presidenta del DIF.
No hay que olvidar que a Benítez Torres en su debut como presidente municipal desde su primer ejercicio al frente de Mazatlán, se le vió envuelto en escándalos por demandas legales en relación a temas como: abuso de autoridad y violencia política en razón de género en contra de mujeres por lo que estuvo a punto de ser inhabilitado como servidor público.
Quiero concluir que aunque los clásicos columnistas y politólogos con etiqueta y tiempos de gloria en el anterior régimen, a la postre hablen de autoritarismo y concentración de poder al referirse a lo que ahora inéditamente pasa en Sinaloa y en el país, les recordamos una vez más, que lo que antes era y les daba el don de pitonisos, no será más.
Ah, y si “El Químico” Benítez continúa con la idea de su “ciudad de luz” para el puerto, abandonando la política de bienestar, de austeridad y de apoyo a los que menos tienen como lo marca AMLO; después que no se queje.
Muy pendientes, que en poco habrá noticias…
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